Recetas Inturotel: Coca de Trampó
Mallorca es una isla llena de sabor y recetas deliciosas con la dieta mediterránea en su ADN. Queremos compartir contigo una de nuestras recetas favoritas para los meses de verano: “la coca de trampó”. “Coca” podríamos traducirla como tarta (en este caso salada) y el “trampó” viene a ser una ensalada de la huerta que lleva tomates maduros, pimiento verde y cebolla blanca ( de la dulce, que no pica). Muchos mallorquines tienen huerto propio y recurren a él para la elaboración de sus platos favoritos, una cocina genuinamente local y Km 0.
El resultado puede que os recuerde una pizza , pero sin mozzarella. Seguramente los orígenes de la pizza italiana y las cocas mallorquinas son comunes. Siglos de intercambio cultural-gastronómico en el mediterráneo han propiciado la creación de unos recetarios de incalculable valor.
Te invitamos a conocer nuestra rica gastronomía alojándote en alguno de nuestros hoteles. En Inturotel te recomendaremos los mejores mercados, panaderías, pastelerías… de la isla y en nuestros buffets y restaurantes podrás degustar producto local y recetas típicas de Mallorca.
A continuación te mostramos como elaborar tu propia “coca de trampó” para que la disfrutes en buena compañía y acompañada de un buen vino tinto mallorquín.
“Bon profit!! I bon estiu” Buen provecho!! I feliz verano
Coca de trampó para 4 personas
INGREDIENTES
3 o 4 tomates maduros
2 pimientos verdes
1 cebolla blanca
Sal, pimienta, pimentón dulce y aceite de oliva
Para la masa:
1/4 vaso aceite de oliva
1/2 vaso agua tibia
1 trozo de levadura de panadería
1 cucharada de manteca
Harina la que precise
CON LAS MANOS EN LA MASA:
Precalentar el horno a 200 grados.
Preparar el “trampó”, cortando el tomate y el pimiento verde a cuadraditos y la cebolla picada, mezclar todo en un bol salpimentar añadir pimentón dulce y aceite. Dejar un poco de tiempo en reposo para que haga adobo.
Mientras tanto mezclamos el aceite, el agua, la manteca, la levadura y la harina y amasamos bien.
Añadir harina hasta que empiece a despegarse de los bordes. La masa ha de quedar blanda y un poco pegajosa, no demasiado dura.
Extender con los dedos la masa sobre una bandeja de horno, préviamente humedecida con aceite.
¡Y a degustar un plato tradicional de Mallorca!