Una primavera en el corazón del invierno
Durante el mes de enero en Mallorca se da un pequeño milagro de la meteorología, “las calmas de enero”, una fugaz y eufórica primavera en el corazón del invierno. Son reducciones del nivel del mar, que se producen en esta época del año y son debidas a la existencia de altas presiones atmosféricas. Suben las temperaturas diurnas y baja el nivel del mar entre 20 y 40 cm. Somos bendecidos por días soleados, sin viento y acompañados de un mar en calma, con la apariencia de lago. Este ambiente coincide con un espectáculo que une belleza natural con la intervención del hombre, la primera floración de árbol frutal del año. Mientras empiezan a brotar las incipientes briznas de cereal, los almendros inician su floración y se visten de laboriosos y ricos brocados, flores delicadas y vaporosas que serán dulce fruto en verano.
Mallorca volverá a cubrirse estos días de un mantel de tonalidades rosáceas y blancas que nos anticipa la primavera. Así como en Japón o el Valle del Jerte con la floración del Cerezo su contemplación nos maravilla y nos infunde la sensación de renacimiento. Te invitamos a conocer más sobre nuestra isla hospedándote en Inturotel y podrás descubrir pequeños milagros de la naturaleza como este.
Uno de los genios de la pintura Vincent van Gogh tuvo una relación muy especial con los árboles en flor, simbolizaban para él el despertar, el renacer, la esperanza… Materializó esa fascinación en su cuadro Amandelbloesem (almendro en flor) en honor al nacimiento de su sobrino.
Así como Vincent (que sufrió de trastorno bipolar toda su vida, atravesando graves depresiones que le recluían y aislaban) también todos nosotros (a nivel planetario) estamos atravesando una etapa de difícil, de aislamiento social, de introspección, algunos de soledad no deseada. Necesitamos más que nunca tener esperanza y fe en que pronto estaremos mejor y volveremos a disfrutar de nuestros encuentros sociales, volverán los viajes al sol y el mar de Cala d’Or en Mallorca.
La contemplación de la floración del almendro nos llena de optimismo y ganas de hacer planes de cara al buen tiempo, disfrutar del campo, de la montaña, de la playa…Toda una celebración de los sentidos para ir dejando atrás este invierno tan largo y abrigar esperanza de un futuro mejor.
El almendro, el árbol de los enamorados
El almendro es el árbol de los enamorados y sus flores son todo un símbolo de amor, de muerte y resurrección. Según un dicho mallorquín: “Flor d’ametller, amor vertader” (Flor de almendro, amor verdadero”). A continuación, os contamos el porqué de este refrán.
El almendro es típico de lugares cálidos, los estudios señalan su posible origen en Asia Central y Norte de África, y desde allí se introdujo a Grecia y Roma. La mitología cuenta su origen mediante la bonita y triste historia de Fílide y Acamante.
Fílide, princesa de Tracia, estaba enamorada de Acamante, un joven y apuesto soldado que fue enviado a combatir a la guerra de Troya.
Al finalizar la guerra, los combatientes regresaron a casa. Fílide iba todos los días al puerto esperando el barco de su amado, pero pasaban los días y éste no llegaba. Al noveno día, la princesa, pensando que no volvería a verle nunca, murió de pena.
La diosa Atenea, apenada por lo sucedido, convirtió a Fílide en un almendro. Al día siguiente Acamante regresó, su retraso se debía a una avería en el barco que viajaba.
Al conocer lo sucedido, Acamante se abrazó desconsolado al árbol, entonces Fílide respondió a sus caricias y a su dolor adornando sus ramas de hermosas flores blancas.
Desde entonces, se cree que las flores de almendro significan el amor que supera todo, incluso la muerte, o que son un consuelo para aquellas personas a quienes amamos. En sí, la flor de almendro significa la vida eterna.
Un paisaje característico de Mallorca
Te invitamos a recorrer los caminos rurales del entorno de nuestros hoteles a pie o en bici, sin prisas, con plena conciencia. Descubrirás que los almendros no suelen ser monocultivo, si no que en Mallorca se vienen sembrando junto a algarrobos y en menor grado higueras, alternándose en las líneas de siembra simétricas de los campos.
Al dirigir la vista hacia arriba te maravillarán el blanco y rosados de las flores del almendro, hacia la tierra, cual alfombra, el verde del sembrado salpicado de manchas amarillas y alegres de la “vinagrella” (Oxalis pes-caprae). Si eres silencioso y paseas durante las primeras o últimas horas del día podrás ser testigo del corretear de alguna liebre, perdiz o conejo.
Sus ramas son habitadas por seres alados como la “Coa-rotja de barraca” (Phoenicurus ochruros), el “Busqueret de capell” (Sylvia melanocephala), bandadas de “caderneres” (Carduelis carduelis) que se comen los pequeños insectos y parásitos que invaden el mundo arbóreo. Corriendo y saltando por entre el verde entapizado del sembrado las rápidas y astutas “Titines” (Motacilla alba).
Puedes ser sorprendido por el fugaz vuelo (como de zumbido de insecto) del “Tord” (Turdus philomelos). Y en las alturas del intenso cielo azul, cual cometas, podrás disfrutar del majestuoso vuelo del “Milà reial ò Milana” (Milvus milvus), el “Esparver” (Accipiter nisus) … y bandadas de cuervos.
Una actividad lúdica muy extendida entre los locales es confeccionar un ramo con las ramas más bellas. Acercando al interior del hogar la esperanza de una primavera aún por llegar. Podemos crear un pequeño “ikebana” (flor viviente), el arte japonés de los arreglos florales. Para ello seleccionamos una única rama o varias de una especie de temporada, en este caso de almendro. Al elegirla debemos tener en cuenta el jarrón o recipiente en el que deseemos prepararlo, ya que la forma y distribución de las flores y capullos deben estar en armonía con su contenedor y el espacio en el que lo colocaremos (preferentemente en la entrada de casa para recibir a nuestras visitas con ese mundo natural en miniatura). Al coger solo una pequeña rama no perjudicamos al árbol ni al labrador, toda flor que arrancamos es un fruto menos que dará en verano.
¿Sabías que la flor del almendro es comestible? Tiene un sabor entre amargo y dulce, lo que la hace muy apreciada en la cocina oriental, al adaptarse a preparaciones tanto dulces como saladas. Es utilizada en sopas, infusiones (muy digestivas) y postres. En Mallorca en cambio es el fruto, la almendra, la protagonista o condimento esencial de deliciosas recetas tanto dulces como saladas.
Rutas recomendadas para contemplar este paraíso
El municipio de Felanitx, a pocos metros de los hoteles Inturotel presenta uno de los paisajes rurales mejor conservados de la isla. Nada más salir de tu habitación podrás iniciar bellas rutas por áreas naturales de especial interés.
La ruta a Cala Mitjana y Cala Sa Nau está salpicada de tierras de labranza, con almendros y algarrobos y en las que pastan las ovejas autóctonas. Si vas caminando y te apetece continuar, puedes seguir bordeando la costa hasta Cala Estreta y pasarás por las antiguas canteras de marés de los acantilados.
Si vas en bici te recomendamos ir desde Cala Sanau hacia la carretera de Cala Ferrera en dirección a S’Horta y antes de llegar al pueblo, coger un pequeño camino que llega a Portocolom pasando por Cala Brafi. Una delicia de paseo. Y para los más atrevidos recomendamos un chapuzón energizante en las tranquilas y transparentes aguas de cualquiera de estas calas. Aunque todavía muy frías, zambullirse en ellas está comprobado que aporta muchos beneficios para nuestra salud.
El camino de Can Marines te acercará al pueblecito de S’Horta entre campos de almendros y algarrobos, rebaños de ovejas y el canto de los pájaros. Puedes seguir desde allí a la zona de “Els Horts” y pasear entre los huertos con el Castillo de Santueri de centinela al fondo.
Otra ruta preciosa comienza en Es Carritxó que atravesando Binifarda nos conduce al Castillo de Santueri con unas vistas espectaculares sobre la costa sureste de Mallorca. Podrás avistar Portocolom, Portopetro, Cala d’Or y con ayuda de unos prismáticos incluso tu hotel. También podrás disfrutar de unas bellas vistas del monasterio de Sant Salvador.
Desde aquí te animamos a visitar nuestra comarca durante la floración del almendro para que puedas vivirlo en persona. Te recomendamos nuestras Inturotel Esmeralda Villas Freestyle para que disfrutes a tu ritmo antes incluso de que abran las puertas nuestros hoteles.
Todo el equipo que formamos Inturotel esperamos con mucha ilusión tu visita y te deseamos unas vacaciones maravillosas.